LO BUENO DE LA CRISIS

Desde hace unos años solo escuchamos la palabra crisis por todos lados, a mucha gente esta palabra la ha dejado sin un puesto de trabajo, con una jubilación anticipada o simplemente no le renovaron el contrato.

Pero para mí esta palabra me ha dado una oportunidad. Tengo 26 años y nunca he podido compartir un paseo en bici con mí padre, ya fuera por trabajo, porque yo tenía que ir a clases o por diversos motivos.

Con la aparición de la crisis a mí padre lo jubilaron anticipadamente, y gracias a eso por fin he podido disfrutar de un paseo a su lado.

A mí desde pequeño siempre me atrajo el ciclismo, en cambio a mí padre le encantaba el fútbol, había jugado de joven y no se perdía nunca el partido de los sábados, mientras cenaba. Los últimos años, creo que le metí el gusanillo del ciclismo, veía conmigo el final de las etapas del Tour o de la Vuelta y hasta conseguí que viera alguna etapa en directo. ¿Sabéis lo que me dijo cuando vio una etapa de la Vuelta desde dentro?: “El ciclismo es mucho más espectacular que el fútbol”. Después de eso le entraron ganas de subirse a una bici nuevamente, pero por culpa del trabajo casi no tenía tiempo, pero la jubilación le ha dado el tiempo que no tenía antes.

Mí padre llevaba casi cincuenta años sin coger una bici, pero ni corto ni perezoso al mes de empezar a andar ya demostraba que tenía destreza sobre ella, no tardo en buscar a algún compañero para compartir sus rutas y sus salidas.

Y hace seis meses me ha planteado que quería realizar el Camino de Santiago con una bici de montaña! Ha vuelto a montar hace menos de año y medio y casi no lleva hechos mil kilómetros y se plantea realizar el Camino de Santiago. Para todo el mundo esto le parecería una locura, pero mí padre es así.

Después de entrenar algunos días bastante fuerte y ver que las piernas le van de maravilla se ha decidido a realizar el camino en este mes de mayo.

Ahora me encuentro en Roncesvalles dándole ánimos, ¿lo bueno de la crisis?, ¡compartir momentos con mí padre!